El esperado sucesor de El mal querer verá la luz el próximo 18 de marzo, sin embargo, Rosalía ya nos ha dado a probar algunos adelantos en forma de primeros singles, portada del del álbum y hasta toda una cuenta de Instagram secreta. Todo apunta a que con este nuevo proyecto se desmarcará por completo de sus origenes flamencos y se adentrará de lleno en la línea más experimental de ritmos latinos que ya inició con canciones como Linda o Con altura. Sin embargo, no por ello dejará de ser un trabajo lleno de matices. De hecho, algunos usuarios en las redes sociales ya están detectado y analizando las referencias que ayudan a entender el trasfondo de Motomami.
Es el caso de la usuaria de Twitter Olga Rodríguez (@bibliofago_), una de las que más ha destripado Motomami hasta la fecha. Y es que cree que el disco va a estar "llenísimo de referencias que no vamos ni a saber reconocer". Así lo ha detallado en un hilo que nos ha dejado con la boca abierta. Estos son los puntos clave:
Latineo con regusto japonés
En Yonaguni, Bad Bunny ya hermanó el reguetón con la cultura japonesa al cantar algunos versos de la canción en este idioma. Siguiendo esta senda, la "K" de Saoko podría tener la intención de añadirle un toque Otaku al término africano "Saoco". Esta palabra ,que da nombre al último single de la catalana, se popularizó en latinoamerica con el significado de sabor, ritmo, música, sabrosura, alegría y buen movimiento.
Además, en jerga puertorriqueña (de donde es Rauw Alejandro, su actual pareja), también significa hacer algo muy bueno o extraordinario. Según apunta Olga Rodríguez, está no será la primera ni la última referencia a la estética nipona que veremos en su álbum. De hecho, lleva meses dejándonos pistas en ese Instagram secreto dedicado a Motomami.
Pero Rosalía ha querido poner una k a “Saoko”, añadiendo un toque otaku en el título. No será la primera ni la última referencia a la estética asiática que veremos en su álbum. De hecho, lleva meses dejándonos pistas en el Instagram de Motomami. pic.twitter.com/iJbUxrlWQr
— olga rodríguez (@bibliofago_) February 7, 2022
La transformación como concepto
Mientras que la letra de Saoko está llena de referencias a su evolución como artista, la mariposa aparece hasta en tres ocasiones en el título del álbum, tal y como se ha estilizado la "eme" para que parezca la silueta de este insecto. Además, en el videoclip del single anteriormente citado aparece tanto una real, como una tienda de mariposas.
La mariposa ha sido considerada tradicionalmente como símbolo de cambio, representa la transformación total debido a las metamorfosis que atraviesa a lo largo de su vida. Así, el huevo primero se convierte en oruga y esta, tras atravesar una fase cercana a la muerte, renace en la forma de este bello y grácil insecto alado.
"Como la mariposa, yo me transformo"
— olga rodríguez (@bibliofago_) February 7, 2022
🦋 La mariposa es el símbolo transformador más claro de todos y probablemente será un leitmotiv en todo su álbum. La silueta grafietada del insecto es uno de los elementos principales de la portada del álbum. pic.twitter.com/RoqcH8Vgz8
Carta de amor al mundo del motor
En El mal querer, "la Rosalía" ya usó motores y frenos para componer De aquí no sales. Al respecto, la catalan ya explicó que, cuando era pequeña, sus padres tenían aficci´ón por las motos y sus sonidos siempre han estado presentes en su vida como algo que le es familiar.
Así, el videoclip de Saoko está protagonizado por una pandilla de moteras que recorren Kiev realizando acrobacias perseguidas por la policía. Además, tal y como apunta Rodríguez, los looks recuerdan a Chun Li, la luchadora del videojuego Street Fighter o a escenas de Grand Theft Auto. También le ha encontrado ciertas similitudes con Fast & Furious, el clásico del cine de acción, y con una de sus películas favoritas: Fallen Angels, de Wong Kar-Wai.
Los looks del videoclip recuerdan a Chun Li, la luchadora del videojuego Street Fighter o a escenas de Grand Theft Auto. También tiene ciertas similitudes con el clásico del cine de acción, ‘Fast & Furious’ y con una de sus películas favoritas: ‘Fallen Angels’, de Wong Kar-Wai. pic.twitter.com/8vT6LC1K4f
— olga rodríguez (@bibliofago_) February 7, 2022
Los Angeles, el primer disco de Rosalía recuperaba y reinterpretan cantes antiguos en los que estaba presente el tema de la muerte. Se trató de un trabajo sobrio, compuesto, principalmente, por voz y guitarra del que pasó a la fusión del flamenco y ritmos modernos en El mal querer. De este modo, la cantante parece decirnos en Motomami que, como el proceso que sigue la mariposa de cambio, ahora la artista ha llegado a una tercera fase en su carrera en la que todas sus influencias se han terminado de mezclar para dar origen a un sonido propio y original. Y por, supuesto, que nos queda Rosalía para rato.
Fotos | @rosaliavt
