Recuperándose de su problema de salud, la princesa Charlène de Mónaco ha empezado en solitario su agenda de compromisos institucionales. De este modo, en las últimas 24h la hemos visto acudir al Hospital Princesa Grace, donde visitó el ala de maternidad sin la compañía de su marido u otro miembro de la familia monegasca. Esta aparición -la primera tras su aniversario de bodas-, se acompañó de un derroche extra de elegancia gracias al estilismo escogido donde el matrimonio formado por los colores blanco y negro se llevaba todo el protagonismo.
La elegancia de un vestido en blanco y negro
Apostando por un diseño de la firma Akris de más de 2.400 euros, su vestido midi en blanco y negro nos recuerda -de nuevo- la importancia de tener a mano este binomio cromático. Protegida por una mascarilla, la princesa Charlène felicitó a las parejas que acaban de ser padres en el hospital y se acercó a alguno de los recién nacidos para conocerlos.
En este mismo hospital, la mujer del príncipe Alberto dio a luz a sus mellizos en diciembre de 2014. El Hospital Princesa Grace no solo homenajea a Grace Kelly con el nombre, también tiene un papel muy importante en la familia principesca ya que los hijos de Carolina de Mónaco (a excepción de Alejandra de Hannover) y los dos hijos mayores de Estefanía nacieron allí.
El look lo aderezó con unas sandalias de tacón de finas tiras cruzadas del mismo color.
Fotos | Instagram @palaisprincierdemonaco
