Aunque en ocasiones parezca mentira, los Reyes también son humanos. Comen, duermen, van al baño y se quitan las legañas cada mañana. Les gusta reunirse con amigos, salir a comer o ver una buena película en los sofás de Zarzuela. Al igual que el resto de mortales, Letizia y Felipe tienen hobbies y los practican en la más estricta intimidad. Ahora, con el palacio mas vacío que nunca, tienen más tiempo para el ocio.
Aunque a veces van al cine o pasean por los mercados de las ciudades que visitan, lo cierto es que la rutina de Felipe y Letizia no se parece a la nuestra. Cada paso que dan está vigilado. No pueden salir a comprar el pan y tampoco sacar la basura en pijama. De eso ya se encarga el servicio. Ellos tiene una imagen, una institucion a la que representar. Sus responsabilidades están por encima de cualquier otra cosa, pero cuando cae la noche y las puertas de Zarzuela se cierran, los monarcas se relajan.
De puertas para adentro, Felipe y Letizia son dos humanos más. Visten ropa cómoda, hacen deporte cada día y les gusta organizar cenas con amigos. Son dos personas curiosas, ávidas de aprender. Tal y como publica El Mundo, suelen invitar a "intelectuales" a Zarzuela y "Doña Letizia destaca como anfitriona mezclando a gente de diversos ámbitos para que conecten entre ellos".
Felipe y Letizia
A la reina también le gusta la lectura. Dicen que devora los libros y así lo demuestran sus compras anuales en la Feria del Libro. Felipe es un gran aficionado a la gastronomía. Cuando tiene posibilidad, sale y prueba. Ya sea con amigos o familia. En más de una ocasión hemos visto al rey junto a su esposa e hijas en un restaurante indio de la capital.
Fotos | Gtres
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