La Gala MET 2018 tenía todo para brillar como nunca antes, el dorado y blanco hubiesen sido perfectos para favorecer la infinita belleza de la pequeña de las Hadid, pero lo cierto es que Bella no ha acertado de ninguna de las maneras con este complicadísimo negro que mezcla varias de las temáticas que hemos visto en este evento los últimos años.
En esta ocasión la modelo se ha decantado por un total look negro firmado por Chrome Hearts compuesto por una falda de crepe bastante ceñida, un corsé de látex y una especie de chaleco estructurado, todo ello coronado por una diadema de brillantes y un velo de tul que crea una larga capa. A Bella Hadid no se le ve cómoda y parece que el look puede con ella, en esta ocasión no nos ha convencido en absoluto.
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