En nuestro camino para ser más sostenibles hemos empezado a plantearnos qué hacer con tantísima ropa que tenemos en el armario. Mucha de ella ya no nos la ponemos, pero tirarla a la basura generando toneladas de desperdicio no es una opción. Lo que sí son opciones son estas seis ideas geniales para reciclar moda y darle mucha vida más allá de nosotras.
Venta de segunda mano
Si ya no quieres una prenda, venderla para que otra persona la disfrute es la mejor opción. Tú sacas un presupuesto para renovar armario y la compradora consigue estrenar por menos dinero. De hecho, hay un estudio que dice que además de reducir el consumo, el mercado de la reventa es lo más sostenible en el mundo de la moda.
Reciclarla en tiendas a cambio de descuentos
Ya hay muchas marcas de moda que recogen ropa usada en las tiendas y te la cambian por descuentos. El grupo H&M es el pionero en este tipo de intercambio, que permite llevar bolsas llenas de ropa (no hace falta que sea de sus marcas) y a cambio te dan un 10%.
Upcycling
Coger la ropa que ya no te pones y hacerle un buen DIY para darle un lavado de cara o adaptarla a tendencias actuales es lo más sostenible. Si ya has consumido y comprado ropa, lo ideal es darle la vida más larga posible y seguir utilizándola adaptándola a las tendencias. Es incluso más sostenible que revender, porque no requiere envíos ni transporte. Firmas como Peregrinas' o Arizona Vintage ya lo hacen.
Donarla en los lugares y contenedores para ello
Muchas comunidades autónomas han dispuesto contenedores de ropa usada que después van a las manos de los más desfavorecidos. Si en tu ciudad no hay siempre puedes recurrir a organizaciones sin ánimo de lucro como ONGs o Cáritas, que la recogen y reparten entre personas en riesgo para que tu ropa tenga una finalidad cien mil veces mejor que el basurero: ayudar a alguien que lo necesite.
Fiesta de intercambio de ropa: el tupperware fashion
Haz de reciclar ropa un planazo con tus amigas. Cada una hace limpieza de armario y trae aquello que no se pone. Con un buen vino, unas pizzas y musicote de fondo, podéis comparar, intercambiar y rebuscar para quedaros con lo que otras no quiere (y viceversa).
No compres, alquila
Esta opción la hemos dejado para el final porque un estudio reciente afirma que es la propuesta menos sostenible dentro del reciclaje de ropa. Esto se debe a las emisiones que requiere su transporte: "genera la mayor cantidad de emisiones a causa del transporte necesario para enviar las prendas de un punto a otro." Sin embargo, sigue siendo mejor opción que tirarlo a la basura.
Fotos | The Bold Type, Girlboss, &Other Stories, @peregrinasclothing, @caritas_es, @ecodicta.
