Creo que tengo el Síndrome del Impostor: qué debo hacer y por qué cada vez es más común en mujeres

Ese sentimiendo de que no valemos para algún puesto o tarea es más conocido de lo que crees y en Upeka lo han analizado al dedillo

Pexels Cottonbro Studio 6532131
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Hay un perfil específico de personas que asumen muchas tareas consiguiendo logros pero no son capaces de asumir sus éxitos y es conocido como Síndrome del Impostor. Es considerado un trastorno mental y va muy vinculado al tema de no saber parar y no poder estar sin realizar tareas, algo que reduce el tiempo de descanso provocándonos diferentes problemas mentales y de salud física.

El término se acuñó en 1978 realizándose un estudio en mujeres que habían conseguido grandes logros y las psicólogas vieron que sobre todo las mujeres desconfiaban de si mismas porque creían que eran un fraude y compartían el sentimiento de no realidad. Cuando se afronta un fracaso aborda la sensación de que no servimos para esa tarea concreta terminando incluso en castigo.

Esto no solo es cosa de nosotros mismos, muchos famosos como Jaime Lorente o Amaia Romero han hablado de ello ya que les daba la sensación de que la gente pensara que son un fraude como artistas. La expectativas que nos ponemos tienen que ser realistas y que lo que hacemos es dando lo mejor de nosotros siendo conscientes de lo que espero que suceda y lo que realmente va a pasar.

Si fallamos la clave es aprender, no castigarnos ya que una de las causas del Síndrome del Impostor es el perfeccionismo disfuncional que nos lleva a controlar tanto un tema que no somos capaces de ver todo lo demás. A modo de resumen para que llevemos un control diario debemos: relativizar, controlar expectativas, capacidad de gestionar los fallos y reducir la comparación.

Y tu, ¿Has sentido alguna vez esta sensación?

Imágenes | @upeka_oficial y Foto de cottonbro studio

En Trendencias | Cómo saber si padeces el síndrome de la impostora

En Trendencias | ¿Eres perfeccionista? Te contamos todo sobre esta característica que puede llegar a convertirse en una obsesión

Inicio