Junto las manos y respecto al tiempo solo puedo comentar, ¡gracias, por el sol y las buenas temperaturas!, cansada estaba de tanta lluvia y frío. Por ello es hora de ir cuidando otras partes de nuestro cuerpo que hemos tenido ocultas y en la mayoría de las ocasiones sin haberlas cuidado debidamente. Anticípate, talones cómo nuevos.
Para las más rezagadas a la hora de cuidarse los pies hay un truco en forma de mascarilla que te ayuda enormemente con las durezas ayudándote a ablandarlas y te deja tus pies en perfecto estado de revisión. Necesitamos 5 aspirinas, mejor de las que estén sin cubierta, un poco de agua y el zumo de medio limón.
Machaca las aspirinas y mézclalo con el agua y el limón, deja que repose unos minutos. Póntelo en los pies, sobre todo en las partes de las durezas y envuelve el pie en papel film transparente de cocina. A continuación aplica calor con un secador de pelo durante unos minutos o acércalos a un foco de calor hasta que sientas los pies bien calentitos.
Pasados esos minutos retira los plásticos y frota las durezas con piedra pómez de manera circular. Te sorprenderá ver cómo te han quedado los pies. Acabamos con un buen masaje con hidratante y ya tenemos los pies perfectos para calzar unas bonitas sandalias.
Imagen | Princess Cy En Arrebatadora | Bendita piedra Pómez
