Para reducir la acumulación de gérmenes, bacterias y ácaros del polvo en la ropa de cama no hay nada como lavarla con frecuencia. Una vez a la semana conviene lavar sábanas y fundas de almohadas y complementar con una buena ventilación diaria, además de con lavado o limpieza regular (pero con menso frecuencia) de almohadas, colchón, etc. Sin embargo, hay otra duda que suele asaltarnos a la hora de lavar este tipo de ropa: cuál es la mejor temperatura.
Podemos pensar que, cuanto más caliente, mejor es para matar ácaros y bacterias. No obstante, si nos pasamos con la temperatura del agua en la lavadora estaremos incrementando innecesariamente la factura de la energía eléctrica y es probable que la ropa de cama se estropee porque no todas las prendas se pueden lavar por encima de 60ºC.
Esto no quiere decir que el agua fría sea apropiada para lavar ropa de cama, ni prendas que tengamos que desinfectar y blanquear, pero es entre 40ºC y 60ºC donde encontramos la temperatura perfecta. Así que lo mejor es revisar la etiqueta con las indicaciones del fabricante para cada caso.
Justine Camacho
Dependiendo del color y, sobre todo, de la composición del tejido será recomendada una temperatura u otra y esto nos ayudará a elegir mejor el programa más apropiado en la lavadora. Por ejemplo, si nuestras sábanas son sintéticas, la temperatura ha de ser más tibia (en torno a 40ºC), mientras que los 60ºC son más apropiados para sábanas de algodón.
Así que, no se trata de apostar siempre la temperatura más elevada ni tampoco la más fría, aunque sea la que sale más barata, porque aunque en las sábanas no veamos manchas en ellas siempre hay suciedad. El término medio y, especialmente, lo aconsejado en la etiqueta de cada tejido es la decisión acertada.
Foto de portada | Liz Vo
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