Que las galletas Lotus son las nuevas Oreo es casi innegable. Están por todas partes: en los cafés, en los batidos, en los McFlurrys y, por supuesto, en las tartas de queso. No lo decimos nosotras, lo dicen expertos en alimentación que tienen claro que hay cierta fiebre por los productos hechos con Lotus.
Personalmente, son un vicio. Uno no muy sano, sí, por lo que intento consumirlas de forma puntual. Pero la vida está para vivirla y, con lo que me gusta a mí hacer postres, las galletas de Lotus iban a entrar en mi repertorio sí o sí.Esta receta de mini cheesecakes de Lotus me ha dado momentos maravillosos. No solo porque, cada vez que se la pongo a invitados recibo muchísimos halagos, sino porque mi paladar es extremadamente feliz comiéndolas.
Como compartir es de guapas y quiero que vosotras también viváis esa felicidad, aquí os dejo esta receta facilísima y muy resultona.
Empezamos creando la base de las mini cheesecakes machacando las galletas de Lotus y mezclándolas, en un bol, con la mantequilla derretida hasta que estén bien combinadas. Lo reservamos y continuamos preparando la cheesecake.
Para ello, en un bol, batimos la nata montada fría hasta que empiece a tener picos. En otro bol, mezclamos el queso crema, el azúcar glas y la crema de galletas. Una vez que estén bien combinados y con una textura cremosa, añadimos, despacio, la nata que hemos montado y la combinamos con cuidado, con movimientos envolventes.
En un molde de magdalenas empezaremos a montar las mini cheesecake. Para eso, a mí me gusta utilizar un molde de aluminio y poner cápsulas de papel de magdalena o muffins para que queden más bonitas y sea mucho más fácil desmoldar. Una vez que tenemos el molde preparado, nos ayudamos con una cuchara para crear la base de galleta. Dividimos, por igual, la mezcla de galleta y mantequilla que habíamos reservado en los nueve moldes de galletas asegurándonos de reserva un poco para decorar la parte de arriba de los cheesecakes. Con la base de la cuchara aplastamos un poco la mezcla creando una base.
Después, con una cuchara o con un sacabolas de helado, repartimos la masa de las cheesecakes en los moldes, sobre la base de galleta y aplanamos la parte superior para que quede lisa. Lo llevamos al congelador 20 minutos o a la nevera durante, mínimo, tres horas antes de empezar a decorarlas.
Una vez que las mini cheesecakes de Lotus están suficientemente frías, las sacamos del molde tanto de aluminio como de papel y decoramos. Aquí podemos dejar volar nuestra imaginación y decorar como queramos. Pero, si queréis hacerlas como yo, lo que hice fue derretir un poco de crema de Lotus y verterla sobre las cheesecakes. Dejamos que se endurezca y, encima, colocamos media galleta de Lotus y un poco de la mezcla de galleta y mantequilla que habíamos usado para la base.
Quedan riquísimas, son muy fáciles de hacer, resultan muy bonitas y vistosas y, lo mejor de todo, es que se hacen rapidísimo y no necesitas horno ni ningún utensilio complicado. Muy resultonas si tenemos invitados o queremos impresionar a alguien. Ya os digo que, en los últimos meses he hecho muchos postres y esta es, con diferencia, la receta que más me han pedido.
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