Clase práctica para degustar caviar, de la mano de Caviar Nacarii

Como puntualmente informaba Almudena, Luxury Spain Gourmet, nos reunía esta semana para mostrarnos las joyas gastronómicas que forman parte de su asociación.

No todos los días se tiene al alcance de la mano y nunca mejor dicho) maravillosas materias primas como las que pudimos conocer y degustar. Con compañeros de viaje del prestigio del crítico gastronómico de ABC, Carlos Maribona o los cocineros Mey Hofmann y Jean- Louis Neichel o Fina Puigdevall, es una ruta impresionante. El encuentro dio para mucho, pero una de las cosas que más me gustó, fue aprender a comer el caviar en condiciones.

Caviar Nacarii cría en su piscifactoría del Valle de Arán, un esturión llamado "Acipenser baerii", originario del Lago Baikal, en Siberia. Sorprendente es la adaptación de dicho animal a las aguas vírgenes y puras del rio Garona, procedentes del deshielo, que se han convertido en el habitat perfecto para los esturiones, una especie milenaria y protegida en libertad, que se está desarrollando en perfectas condiciones a 2.000 metros de altura.

Las cosas como son, yo siempre había comido el caviar sorbe blinis o tostadas de pan alemán, incluso ¡que pecado! con una cucharilla metálica. Ahora sé que todo eso puede desvirtuar el sabor del auténtico caviar, gracias a Sara Morales, Directora Comercial de Caviar Nacarii, quien nos ofreció una cata con demostración.

En primer lugar, es fundamental conocer la fecha de envasado y elaboración. Cuanto más anterior en el tiempo, más intenso será su sabor. La temperatura ideal para mantenerlo es de entre -3º y 3º, pero, debe consumirse entre 10º y 12º ¿cómo lo haremos?

La lata debe mantenerse cerrada hasta el momento de su degustación para evitar que coja gusto u olores ajenos. Si somos tan pesados como yo y nos negamos a servirlo en la lata, procuraremos que el recipiente elegido sea de cerámica, sobre una base fría.

Tradicionalmente, los rusos toman el caviar con cucharas de madera, nácar o hueso, que no interfieran en su sabor y lo depositan sobre el dorso de la mano, esperando que tenga una temperatura parecida a la de el cuerpo humano para llevárselo directamente a la boca.

Lo primero que vamos a notar es una textura muy suave, cremosa, que se rematará cuando presionemos ligeramente las huevas contra el paladar y se vayan fundiendo en nuestra boca dejando todo su sabor al ir deshaciéndose. El caviar fresco no explosiona en la boca como los que han sido tratados térmicamente. El caviar de verdad tiene un regusto postlargo, que puede ser intensificado con las bebidas elegidas. Los rusos suelen tomarlo entre chatos (si me permitís la expresión) de vodka blanco muy frío, pero puede ser degustado con vino blanco seco,cava brut nature o, como más me gusta, con champagne.

Un detalle, se puede acompañar el caviar de blinis, patata cocida o pan blanco, la mantequilla, la dejamos para las tostadas del desayuno, ya que es un truco para cuando el caviar es mediocre, que no se note.

¿Quién se anima a tomar un poco más de Caviar Nacarii?

Más información | Caviar Nacarii En Embelezzia | El chef Eric Ripert de Le Bernardin lanza su propio caviar en edición limitada

Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com

VER 0 Comentario

Portada de Trendencias