Una pieza infalible: las reglas para llevar el chaleco de tu traje como protagonista de un look

Seguramente te habrá llegado también la invitación a ese evento y fiesta al que no puedes dejar de asistir, pero resulta que te enfrentas al problema de si vestir correctamente con un traje completo o apostar por un outfit que raye drásticamente en el desenfado. Por fortuna, el chaleco de los trajes de tres piezas es el ítem perfecto que te puede sacar de un gran apuro si es que sabes lucirlo correctamente (y por supuesto, aquí te diremos cómo).

Pierde el miedo a parecer mesero o a que alguien te dé las llaves de su auto confundiéndote con un miembro del ballet parking. El no lucir el traje completo no significa que emules al tío pasado de copas que no sabe dónde dejó el saco, al contrario: es la oportunidad perfecta para jugar con tus básicos de armario y crear nuevas combinaciones.

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Una pieza infalible: las reglas para llevar el chaleco de tu traje como protagonista de un look ( 7 fotos)

La eterna camisa blanca

Una regla escrita con fuego en el manual de la vestimenta masculina es que, si vas a usar un traje en conjunto, tu primera opción debe ser una camisa blanca, ya que los estampados no se llevan muy bien con una prenda tan formal como ésta.

Todos menos el último

Al igual que el blazer, el último botón del saco no se abotona, ya que al estar sentado te haría ver con más volumen del que cuentas, lo que nos lleva al siguiente punto…

No los uses si tienes sobrepeso

Perdón, pero así son las cosas: una pieza que hace que tu anatomía superior llame la atención no es apta para personas con algunos kilos de más, en este caso, lo mejor sería optar por el traje de tres piezas al completo.

Apuesta por colores sobrios

A menos que seas un comediante de medio pelo, evita los chalecos con texturas satinadas o muy brillosas. En cambio, puedes llevar chalecos en lana o algodón para crear más combinaciones con cualquier look.

Acompáñalo con un aire vintage

Como si salieras de la foto en sepia de tu abuelo, lleva tu chaleco con un reloj de bolsillo o cualquier otro detalle que te haga ver como venido de otra época. Recuerda que esta prenda tiene la capacidad de transformar por completo un look.

Aléjate de los tejidos llamativos

Una cosa es parecer un hipster y otra es ser un nerd de una universidad en los años sesenta. Si vas a llevar un chaleco que tenga un motivo tejido como de espiga, de príncipe de gales o de pata de gallo, tu traje debe ser exactamente igual, de lo contrario no te lo pongas.

Nunca, pero nunca lo uses con una t-shirt

Grupos pseudo punk del año 2000 como Simple Plan y Kudai hicieron que ese look se viera cool… por sólo un tiempo. No destroces la elegancia de una pieza como ésta llevándola con una camiseta estampada y evita (por lo que más quieras) vestirte como un chavo ruco.

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