Estás guardando mal tus suéteres y no lo sabías: así los puedes colgar correctamente para que no se deformen y tenerlos siempre a la mano

Puede que lleves años colgando tus suéteres en la percha como si fueran camisas normales sin pensar mucho en ello, pero ese gesto inocente puede estar dejándolos más deformados que tus planes del finde pasado. Lo que muchos no saben es que los tejidos de punto (especialmente los de lana gorda, merino o cachemira) tienden a estirarse y perder forma si se cuelgan del gancho.

La gravedad hace su trabajo y, con el tiempo, las hombreras del suéter acaban más caídas que tus ganas de salir un lunes por la mañana, por ello, los consejos de expertos en cuidado de prendas nos recomiendan no colgar directamente un suéter en una percha convencional, porque puede provocar que la prenda acabe con bultos feos en los hombros y estirada por debajo, un clásico error que arruina incluso el mejor jersey de invierno.

La forma correcta de guardarlos en una percha sin correr el riesgo de que se deformen es, alisándolos en una superficie plana y poner una percha encima, con los extremos de la misma a la altura de las costuras de los brazos y con el gancho en dirección al cuello.

El siguiente paso será doblar las mangas hacia dentro, en dirección contraria: de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, así nos aseguramos que la prenda no se caiga de la percha, pero sin que se deforme con el tiempo

Con este truco tu ropa de invierno no acabará con forma rara, podrás ponerte tus favoritos sin fruncir el ceño al ver cómo les ha sentado el tiempo, y a la vez tu armario tendrá un aspecto más ordenado, que al final también es importante para arrancar el día con buen rollo.

Foto de Aedrian Salazar en Unsplash | The Scott Effect