5 razones por las que preferimos a Fassbender que a Brad Pitt

Hace unas semanas, os contábamos que la pareja Fassbender-Vikander amenazaba el reinado de Brangelina en Hollywood. Hoy ya no sé si lo tenemos tan claro, después de que Alicia olvidara mencionar a Michael en su discurso de agradecimiento del Óscar y que ni siquiera posaran juntos sobre la red carpet. Pero, aun así... Fassbender nos sigue gustando. Mucho. Muchísimo. Más que Brad Pitt. ¿Que por qué? Pues por todo esto:

Una belleza menos aniñada

Que Brad Pitt es guapo, no está en duda. Guapo es. Guapísimo. Pero siempre ha tenido una belleza aniñada que a los veinte años le quedaba fenomenal, pero a los cincuenta y dos (¡cincuenta y dos!) queda como rara.

En cambio, Fassbender, a sus treinta y ocho gloriosas primaveras, es todo lo masculino que se puede ser. No tiene demasiada explicación, es un je-ne-sais-quoi de pelirrojo empotrador al que no hay que buscarle base científica.

Bailando... no hay color

Para qué os lo voy a explicar con palabras, si hay vídeos que demuestran que Fassbender baila así...

...y Brad Pitt, así:

Es un moderno

Los modernos nos gustan. Podemos engañarnos diciendo que no, pero han llegado para quedarse... y conquistarnos. Y en el tema del moderneo, Fassbender no tiene rival: continúa viviendo en Hackney, ese paraíso hípster del este de Londres; ha hecho de la barba un estilo de vida; no tiene problemas aparentes con los desnudos cinematográficos; y tiene una relación como muy moderna con Alicia Vikander.

Y no digo yo que Brad no tenga su punto modernito en algunas cosas, pero... ¡usa faja! Como mi abuela, vamos. Pocas cosas menos modernas que una faja se me ocurren.

El punto canalla

Fassbender tiene ese halo malote que es casi cuestión de ADN. Y Pitt lo intenta, no vamos a decir que no, pero... le falta algo. Quizá es que Brad es demasiado guapo como para verlo como a un canalla, mientras que Michael es tan absolutamente sexy que el punto rebelde lo lleva en la cara.

Sin cargas familiares

En un universo paralelo en el que cualquiera de estos dos hombretones pudieran fijarse en nosotras, habría que entrar a valorar cuestiones pragmáticas. Y es que Fassbender aporta solo a su perrita Spinee como carga familiar, mientras que Pitt... madre del amor hermoso, yo estaría cuatro meses solo para aprenderme los nombres de tanto niño.

Así que, Michael, que no te hunda haberte quedado sin el Oscar ayer, ni que Alicia tuviera ese lapsus de ignorarte. Nos gustas más que Brad Pitt, ¡no te quejes!

PD: Brad, tranquilo. Aunque Fassbender te haya adelantado, tú sigues siendo uno de nuestros favoritos.

Fotos | Cordon Press,

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