Diferencias entre peluquerías caras y peluquerías baratas

Estamos en época de crisis y de ajustarnos el cinturón, de ahí que todos los negocios relacionados con la belleza hayan notado un cierto descenso de sus ingresos. Sin embargo, y a juzgar por las conversaciones que he tenido últimamente con los dueños de algunos de ellos, este descenso de sus ventas de servicios no ha sido tan acusado como en otros sectores.

En mi caso un cambio de lugar de trabajo me ha llevado a dejar la peluquería a la que acudía semanalmente al salir de trabajar y cambiarla por otra más cercana. Este cambio ha llevado aparejado, a mi favor, el que he dejado una peluquería bastante cara por otra más asequible, con el consiguiente ahorro para mi bolsillo.

Ahora bien, aunque mi bolsillo lo ha notado, también lo ha notado mi pelo, o lo he notado yo si queréis verlo así. Por eso hoy me gustaría comentar con vosotras las diferencias que he notado de un establecimiento a otro, aparte de que los servicios cuestan aproximadamente la mitad.

En primer lugar lo que más echo de menos es el mimo con el que me cuidaban el pelo, sin un tirón ni un lavado de cabeza enérgico que te hacía temer por tu integridad física. En la peluquería cara eran muy delicadas y además me daban un masaje capilar con la mascarilla que hizo que el pelo dejara de caérseme bastante.

Los productos utilizados son otra de las diferencias: antes me lavaban el pelo con la misma marca que vendían (Kerastase) y ahora lo hacen con un champú a granel que les suministra la casa matriz de la peluquería. Y esto se nota muchísimo en el pelo, sobre todo la hidratación o suavizante, que puede dejarte el cabello como la seda directamente si es buena.

En la peluquería que frecuento ahora he notado que el pelo se me ensucia antes (quizá producto de lo que cuento arriba) y también que el tinte me dura menos, probablemente por usar productos menos efectivos. Se me abren más las puntas y tengo que sanearlo más a menudo.

Por último hay otras diferencias menos importantes, como por ejemplo que antes podía arreglarme las cejas o las uñas en la misma peluquería (tenían salón de estética) o que incluso me invitaban de vez en cuando a un café. Realmente sólo he ganado económicamente, razón por la cual voy una vez cada 5 ó 6 semanas a la antigua para darme una “cura” capilar.

¿Cuáles son vuestras experiencias al respecto?

Imagen | Whatleydude
En Arrebatadora | Pedicura: Que no te engañen , No peines tu pelo ondulado cada día

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