Si hay una entidad en todo el planeta que sepa sobre geografía, culturas del mundo y patrimonio histórico esa es National Geographic. Así que nos interesa mucho saber que es lo que opina con respecto a cuál es el pueblo más bonito de España. Sobre todo, teniendo tanta variedad entre la que elegir. Pues los estadounidenses se han pronunciado y han dicho que la villa medieval de Aínsa, en Huesca, es la localidad más encantadora del país.
Esta villa aragonesa, capital del antiguo condado de Sobrarbe, se encuentra situada en la confluencia de los ríos Ara y Cinca, bajo la mirada de Peña Montañesa. Sin embargo, lo más significativo es que en su casco antiguo el tiempo parece haberse detenido en el medievo. Por supuesto, su patrimonio está catalogado como Conjunto Histórico-Artístico.
Por allí han pasado celtas, romanos, musulmanes, cristianos… una diversidad y riqueza que conviertem la visita a la Villa de Aínsa en un viaje sembrado de maravillosas sorpresas. No obstante, dl punto neurálgico de la villa es su porticada plaza Mayor donde tiene lugar una curiosa recreación conocida como La Morisma. Eso sí, solo tiene lugar el primer domingo de septiembre de los años pares y en ella se rememora el triunfo de las huestes del rey García Ximenez sobre el ejército sarraceno, con la ayuda de la intercesión divina en forma de cruz.
Al fondo de este enclave se alza la iglesia románica de Santa María (que data del siglo XII), considerada como uno de los mejores ejemplos del románico del Alto Aragón y declarada Monumento Nacional. Especialmente llamativo, y algo que ningún visitante se puede perder, es su bello claustro, donde el románico y el gótico se unen.
Después, los visitantes no pueden dejar de pasear por los restos de su castillo, donde se celebra todos los veranos el Festival Internacional de Música Castillo de Aínsa y la muralla. Así como las fachadas de casa Arnal (del siglo XVI) y casa Bielsa (siglol XVI-XVII), que son un resumen en piedra de la idiosincrasia de una villa con fuerte personalidad y un patrimonio cultural fascinante.
No obstante, los que se queden con ganas de más y quieran tener una visita bien intensiva pueden pasarse por el Ecomuseo de la Fauna Pirenaica, ubicado en la torre del homenaje del castillo. Del mismo modo, los amantes del senderismo y de la naturaleza no van a querer irse sin haber recorrido el itinerario que discurre entre Aínsa y Boltaña.
Fotos | Jorge Franganillo, @turismodearagon
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