Fernanda Tavares, elegancia y sensualidad brasileña

Fernanda Tavares, elegancia y sensualidad brasileña
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Fernanda Tavares rebosa belleza y sensualidad allá por donde va. Como buena brasileña, las curvas de esta top model la han valido para triunfar sobre todo en el mundo de la lenceria y de la publicidad, pero su aportación sobre la pasarela también ha sido importante.

Y es que no estamos hablando de una recién llegada precisamente. Tavares, que tiene 28 años, puede presumir de llevar 19 años desfilando. Sí, habéis leído bien, con 9 años ya desfilaba en pequeños certámenes celebrados en su localidad natal de Rio Grande do Norte.

Animada por su madre, con tan sólo 13 años ya tomaría parte del concurso que anualmente celebra la agencia de modelos Elite Model, y ya adivináis quién fue la ganadora de la edición brasileña…sí, nuestra Fernanda Tavares.

Fernanda Tavares

La victoria en este certamen le abrió las puertas al mundo de la moda, y ya tenía sobre la mesa la propuesta de trasladarse a Sao Paulo en 1994 con sólo 14 años. Oferta que aceptó, demostrando ser todo un ejemplo de precodidad.

Pero no sería hasta pasados 3 años, concretamente en 1997, cuando Fernanda Tavares consiguió dar el salto a la escena internacional con el fichaje por la agencia Marilyn. Sale de su Brasil natal y ya comienza a trabajar en París y Nueva York. De hecho su primer trabajo importante sería para Chloé, siendo una de sus imágenes promocionales.

Un año más tarde daría el salto a las pasarelas, de la mano de Roberto Cavalli en Milán. Ese mismo año también desfilaría para Loewe y para Exte. Tan sólo cuatro desfiles pero que le valieron para adquirir la experiencia necesaria sobre la pasarela. No en vano, estaba a punto de cumplir los 18.

vogue tavares

1998 también sería su año de confirmación en lo que a portadas de revistas se refiere. Si algo puede presumir Fernanda, es del gran número de portadas que lleva acaparadas desde sus comienzos. En su primer año ya sería portada del Marie Claire en sus versiones brasileña, americana y alemana, de L’Officiel y del Vogue francés.

Y como no, de la mano de las portadas también vendrían sus primeros contratos publicitarios, como el caso de Guerlain, que pagó más de un millón de dólares para que Fernanda posase desnuda en la campaña de su perfume Shalimar.

Guerlain

En 1999 se trasladaría a vivir a Nueva York y poco a poco comienza a asentarse y a tener un hueco entre las tops más importantes del panorama internacional. Su 1,78 y más de 114 centímetros de piernas, le hacían ser una de las tops más prometedoras, junto a Giselle Bundchen.

En el 2000 ya la veríamos desfilar para Carolina Herrera, Valentino, Donna Karan, Versace y Ralph Lauren, del que sería imagen publicitaria ese mismo año.

Fernanda Tavares

Y como no, no podía faltar su cita con Victoria’s Secret. En el año 2000 haría su primera aparición, repitiendo en el 2001, 2002, 2003 y 2005.

Pero Fernanda, a pesar de su indiscutible belleza, no llegó a despegar en las pasarelas en comparación con otras compatriotas, como Giselle Bundchen por poner un ejemplo, centrándose más en campañas publicitarias y en portadas de revistas, donde Fernanda tiene un auténtico filón. Buena prueba de ello serían sus siguientes contratos publicitarios con la línea underwear de Dolce & Gabbana y con L’Oreal en el 2002, convirtiéndose en una de las imágenes de la casa francesa.

Posteriormente entre el 2003 y el 2004, la veríamos en la portada del Sport Illustrated en su especial Swimsuit, en el catálogo de ropa de baño de H&M y también como imagen de Versace.

En el 2005 haría un paréntesis en su carrera como modelo. Regresa a su Brasil natal y se dedica a conducir un programa de televisión en la MTV brasileña que compaginaría con el rodaje de la película Gomez et Tavares (pura coincidencia con su apellido). No desperdició el tiempo y allí conocería al actor Murilo Rosa, con el que se casaría en el 2007 y con el que tendría un hijo ese mismo año.

fernanda tavares

2008 fue el retorno de Fernanda Tavares al mundo de la moda y la publicidad. Primero siendo imagen del perfume Davidoff Cool Water y posteriormente volviendo a las pasarelas 5 años después de su última aparición, de la mano de Dsquared2.

Cabe reseñar su compromiso contra el maltrato animal y contra el uso de pieles, ya que es miembro de la organización PETA, prestando su imagen y apoyando a la causa en diferentes actos, todo un ejemplo del que muchas y muchos deberían tomar nota.

Comentarios cerrados
Inicio