Siete playas que nos enamoran y que no tienen arena blanca (¡ideales para escapadas de invierno!)

Siete playas que nos enamoran y que no tienen arena blanca (¡ideales para escapadas de invierno!)

Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Siete playas que nos enamoran y que no tienen arena blanca (¡ideales para escapadas de invierno!)

Aunque medio mundo está ya casi metido de cabeza en el invierno, existen zonas privilegiadas en donde aún se puede disfrutar de la playa, el sol y ese relax que solo se consigue con los pies hundidos en las arenas blancas o doradas. ¿Blancas o doradas? No siempre. A lo largo y ancho del planeta, nos hemos encontrado con playas con arena de todos los colores. Espectáculos visuales a los que nos encantaría escaparnos ahora que el frío nos ataca.

Arena roja | Kaihalulu Beach (Hawaii)

Rodeada de acantilados rojos de origen volcánico, la playa de Kaihalulu se une a la fiesta cromática con sus arenas del mismo color, en contraste con un mar que siempre tiene el tono azul impoluto del Hawaii más paradisíaco. El complicado acceso, a través de una ruta de senderismo empinada y difícil, hace que nunca esté masificada y se pueda disfrutar de su aspecto de ensueño.

Además de su peculiar color, la playa es también un sitio sagrado de la mitología de las islas, ya que fue el lugar de nacimiento de la reina Ka'ahumanu y un escenario célebre de batallas históricas.

 

Arena negra | Las Malvas (Lanzarote)

En las islas Canarias podemos encontrar varias playas de arenas más o menos negras, pero quizá la más encantadora sea la de Las Malvas, en Lanzarote. Por su tamaño, de apenas 300 metros, que la convierte en un refugio íntimo en el que dejarse todo el estrés del año. Por su difícil acceso, a través de un camino de tierra de unos cinco kilómetros desde el pueblo de Tinajo. Y por su aire místico, con la arena negra procedente de las Montañas de Fuego del Timanfaya.

Lanzarote

Arena violeta | Pfeiffer Beach (California)

El sur de la península de Monterey acoge la región de Big Sur, una de las zonas menos pobladas de California, conocida por su carácter montañoso, en el que la sierra de Santa Lucía emerge del Pacífico y da origen a formaciones tan increíbles como la playa de Pfeiffer. En ella, grandes parches de color violeta se entremezclan con la arena dorada, dando lugar a un color que cambia de intensidad con los diferentes matices del sol.

 

Arena marrón | Porto Covo (Portugal)

Porto Covo es un pequeño pueblo a 160 kilómetros al sur de Lisboa, en plena región del Alentejo costero, una de las más tranquilas de la costa portuguesa. Con poco más de 1.000 habitantes, sus tres playas, sobre todo la Praia Grande, son las favoritas de muchos lisboetas que se escapan a disfrutarlas durante buena parte del año. Sus arenas son de color marrón anaranjado y sus olas, excelentes para la práctica del surf. El mejor momento para vivirla en todo su esplendor es el atardecer, cuando los colores de la arena se entremezclan con los del cielo. Imprescindible tener la cámara a mano.

Portocovo

Arena verde | Papakōlea Beach (Hawaii)

Volvemos a Hawaii para disfrutar de otra de las maravillas que la naturaleza ha dejado en las islas. La playa de arena verde de Papakōlea tiene su origen en la olivina, un mineral que forma parte de los residuos volcánicos que se han acumulado en esa zona junto al mar. Como con muchas otras de este listado, una de las razones de su éxito es la dificultad de su acceso, que solo es posible en 4x4, lo que ha preservado, a lo largo de los años, su aspecto virgen y su ambiente tranquilo y relajante.

 

Arena naranja | San Blas Bay (Malta)

En la isla de Gozo, al final de un camino escarpado que parte del pueblo de Nadur, encontraremos la playa de San Blas Bay, un remanso de paz con arenas de un color naranja brillante que, bajo el sol mediterráneo, adquiere tonalidades que sorprenden a sus visitantes. Sus aguas cristalinas la convierten, además, en un lugar perfecto para la práctica del esnórquel.

 

Arena multicolor | Praia dos cristais (A Coruña)

En el pueblo de Laxe, en plena Costa da Morte gallega, se encuentra la praia dos cristais (playa de los cristales), un ejemplo de cómo la naturaleza puede convertir en bello incluso aquello con que la agredimos. En el lugar donde se ubicaba un antiguo vertedero, el mar fue devolviendo, pulidos, trozos de cristal que ahora le dan al lugar un aspecto único, con sus arenas convertidas en pequeños cristales multicolores, entre los que predominan los verdes y los transparentes. En los últimos años, se ha convertido en un must que visitar por gallegos y turistas.

Cristais

Imágenes | Paul Stephenson, Alex Schwab, Camiño dos faros.

En Trendencias | España tiene las mejores playas de Europa, pero solo estas son también las más cool

[

Ig Tre

](https://www.instagram.com/accounts/login/?next=https%3A%2F%2Fwww.instagram.com%2Ftrendencias%2F)

Comentarios cerrados
Inicio