Pasar del "Sí, quiero" al "No, no quería" no es tan raro hoy en día. Pero hay celebrities que no sólo marcan récords en número de divorcios, también en cambiar de opinión y devuelven a sus parejas como quien devuelve unos pantalones que se ha comprado en las rebajas.
Desde Drew Barrymore, pasando por J.Lo o Kim Kardashian, hemos hecho un recuento de los matrimonios que duraron menos que una temporada de tu serie favorita. O que un fin de semana en Las Vegas.
J.Lo y Cris Judd: 218 días
Todas sus relaciones han sido siempre como un relámpago y a los pocos meses de empezar a salir con Ben Affleck, Ojani Noa o Marc Anthony, J.Lo ya había recibido una propuesta de matrimonio. Pero sin duda, la relación con el bailarín Cris Judd fue la más fugaz de todas y la que terminó en matrimonio tan sólo tres meses después de empezar a salir.
Drew Barrymore y Tom Green: 163 días
Vale, no es el matrimonio récord de Drew (su relación con Jeremy Thomas apenas duró dos meses), pero en este caso decidió esforzarse justo el doble. Y lo consiguió. Ahora acaba de separarse de su tercer marido y ha vuelto a batir un nuevo récord: tres años.
Renée Zellweger y Kenny Chesney: 128 días
Su boda en una playa tropical en 2005 ocupó todas las portadas habidas y por haber. Su divorcio, apenas unos meses después, fue mucho más discreto, pero Renée lo clasificara en la categoría "el peor error de mi vida" nos da algunas pistas.
Bradley Cooper y Jennifer Esposito: 120 días
El sueño de muchas es casarse con Bradley, pero para la actriz el sueño se convirtió en una pesadilla a los pocos días de su boda y tras una corto compromiso de tan sólo dos meses. En declaraciones posteriores reconoció que él no resultó ser lo que esperaba. Y nos mordemos de la impaciencia preguntándonos a qué se refería exactamente.
Nicolas Cage y Lisa Marie Presley: 107 días
Hay muchas razones equivocadas por las que casarse con una persona, pero Nicolas Cage eligió una de las peores: ser fan fatal del padre de su futura mujer. Por mucho que te guste Elvis Presley, eso no te va a ayudar a sobrellevar la rutina del día a día.
Kim Kardashian y Kris Humphries: 72 días
Les separó algo más que treinta centímetros de estatura: un reality show y que millones de personas asistieran a su pedida de mano, a los preparativos y a la decepción de después.
Pamela Anderson y Rick Salomon: 60 días
Su primer matrimonio se celebró en Las Vegas (¡cómo no!) y duró apenas dos meses. Pero en el año 2014 volvieron a darse una oportunidad y esta vez consiguieron aguantar juntos casi un año.
Mario López y Ali Landry: 18 días
Hay formas y formas de cargarse un matrimonio en menos de tres semanas, pero sin duda el método definitivo es engañar a tu pareja durante la Despedida de Soltero, que si se celebra después de la boda debería llamarse Bienvenida de Casado, ¿no? Muy mal, Mario, muy mal.
Britney Spears y Jason Alexander: 55 horas
Es la ganadora absoluta de este ranking (o la perdedora, según se vea). En el año 2004, en un momento un poco desquiciado de su vida, Britney se casó con su amigo de la infancia Ali en Las Vegas a las 5 y media de la mañana, que es una estupenda hora para celebrar una boda, porque evitas que mucha gente se auto-invite y te acabe saliendo el bodorrio por un pastizal.
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En Trendencias|La vida no es tan bonita como nos la pintan las redes: el divorcio de la "pareja perfecta" de YouTube lo demuestra (una vez más)
