Espero no perderme con las diferencias horarias pero sigo en mi primer día en Nueva York, recién terminada nuestra presencia en el fitting de Catherine Malandrino. Y ni un segundo sin que estéis informadas de todo.
Catherine Malandrino es una diseñadora francesa que cuenta con varios pisos en la zona oeste de Manhattan, en la 39th. Allí, rodeada de un equipo muy joven, muy amable, donde recibe a modelos, prensa, make up artist y hair artist, pudimos ver parte de la colección que saldrá el domingo a la pasarela.
En el piso undécimo, en un ambiente que me esperaba más tenso por estar apenas a 24 horas de desfilar en la Semana de la Moda, Catherine seguía decidiendo qué combinar con qué. Y su rostro reflejaba más que dudas. Vaya por delante que las modelos son increíblemente altas, con presencia de bellezas asiáticas preciosas y con chicas que simulan ser compatriotas francesas de la diseñadora.
Una de las normas de hoy era no sacar imágenes de la colección. Bueno, no tendremos las imágenes, pero en cuanto os describa las prendas las reconoceréis en el desfile del domingo. Dos me han enamorado, mejor dicho, tres. Un abrigo de visón blanco marcando cintura con un detalle en piel negra; otro abrigo de manga francesa de pelo natural en tonos grisáceos o azulados (la luz era realmente compleja para definir colores), y una chaqueta cortita de lana roja y ribetes de piel en color negro. Ya me diréis el domingo.
Cortes perfectos, mujeres que lucían pantalones de cintura altísima (imposibles para el resto de las mortales) así como las faldas cortas plisadas con vuelo que estilizan y entallan como si fueran hechas a medida. Y en verdad casi lo eran, porque el equipo de Malandrino estaba pertrechado de la mejor manera con alfileres, tijeras, imperdibles… Siempre fotografiando cada detalle a modificar después.
Un vestido negro y rojo con raya blanca ha sido modificado tantas veces que aún no tengo claro que en el desfile lo pueda reconocer.
Maquillaje con Gato
El maquillaje para el desfile de Catherine Malandrino corre a cargo del español Gato, de Maybelline. Más de cuatro horas de trabajo para probar texturas, colores, definir una misma idea y plasmarla en la modelo. ¡Un detalle! Ayer era la única que llevaba una diadema. Pues bien, sin esta prenda para el cabello el maquillaje no hubiera podido llevarse a cabo, porque fueron varias las modelos que la necesitaron (si es que las periodistas somos necesarias en cualquier parte… ejejejje) Concretamente esta diadema.
La mujer de Malandrino para el próximo otoño – invierno tiene aires a lo garçon. Una de las modelos con el pelo corto en ese estilo parecía ser su mejor ejemplo. Piel casi de porcelana donde era realmente difícil plasmar las ideas de la diseñadora en el maquillaje. El look completo podréis verlo en Arrebatadora, donde seguiremos las tendencias de maquillaje de pasarela y la apusta para el cabello.
Laurent, francés también, era el encargado de dar forma al cabello de las modelos. Un equipo de dos ayudantes con planchas, secadores, alargadores de cable por si algo falla, extensiones de cabello, peines de todas las formas y un objetivo claro: marcar la raya de una manera que casi parecía imposible.
Entre el arsenal de productos desplegado en la mesa, una marca que en España todavía no está, Bumble and Bumble.
Cena con las modelos
Creo que no es habitual, pero lo iré comprobando estos días, porque tener un fitting con 40 modelos no es lo lógico. Así que el momento cena llegó. Fotógrafos, prensa y modelos compartimos unos noodles picantes como no he probado ni en Indonesia.
¿Desmentimos que pasen hambre? Bueno, quizá sea el invierno, quizá la hora, quizá es que todos teníamos hambre, pero allí casi todas repitieron.
Otro detalle. ¡Pero qué desastre son las modelos! Jerseys, bufandas, abrigos, bolsos… todo revuelto sin orden ni concierto… para mi ha sido una sorpresa, seguro que entre las lectoras modelos que tenemos es la lógica, pero no siempre se tiene acceso a un fitting, así que podemos sorprendernos.
Primer día de inmersión en la Semana de la Moda de Nueva York, y gran resultado. Veremos el domingo en el desfile de Catherine Malandrino con qué nos sorprende tras lo visto ayer. No os perdáis los botines, negros de tacón altísimo, con cordones y detalles de encaje.
Para hoy, fitting con Custo y Carlos Miele. Y siempre alguna sorpresa. ¡Os esperamos!
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