Tras Nueva York, Milán, y Londres siempre nos queda París y su semana de la moda, capital de capitales por excelencia, madre de todos los estilos, porque es aquí donde nacen: en el resto de ciudades, solamente se interpretan.
En París el estilo no puede explicarse porque es prácticamente una cuestión de sangre o empadronamiento, en la esquina más inhóspita, de la manera más sobrevenida, la ciudad del Sena rezuma estilismos peculiarmente exquisitos.
Y es que si el buen gusto tuviera lugar de residencia: éste sería su sitio.
El blazer se está convirtiendo en la prenda fetiche de toda mujer. ¿Sabéis de donde viene su nombre?, pues del capitán de fragata (el capitán Blazer) que por primera vez vistió a toda su tripulación con una prenda se sarga azul y botonadura dorada para recibir a la reina de Inglaterra. No fue sin embargo hasta Yves-Saint Laurent cuando la americana se integró oficialmente en el armario de la mujer, y la historia continúa hasta hoy, y por mucho tiempo.
Anda, pero si es Bárbara Martelo a la entrada del desfile de Christian Dior, y de Balmain...qué raro, ¿verdad? De todos modos, por mucho que esté harta de verla hasta la saciedad, este tipo de blazers de manga armada me encantan, y más, en tejido vaquero y combinada con pitillos de cuero negro.
De esta mujer que sale del desfile de Miu Miu me entusiasma el cardigan de manga farol, que aunque un poco (demasiado) grande, resulta perfecto combinado con la falda tipo lencero y medias oscuras (acordaos que este invierno se ha llevado mucho eso del vestido de puntilla blanco, totalmente veraniego, con media muy tupida).
En el otro extremo está esta otra chica, de la que destaco el vestido multicolor (tiene la medida perfecta para llevar con botín tobillero de caña ancha), y de la que me da una envidia tremenda que en pleno invierno lo combine con una minicazadora irrisoria y sea del clan Victoria Beckham y pueda lucir pierna sin congelarse de frío.
En el terreno de lo práctico me quedo con Marie y un look espléndido sin hipotermia de por medio: jean tipo boyfriend, bota arrugada y abrigo masculino. Obviaremos que su economía le da para llevar un Birkin de Hermès...
París no sería lo mismo sin pieles (es lo que tiene el clima continental) y lejos de looks "viejunos" (como muchos calificastéis el estilismo de Kate Moss en la fiesta de Fendi, y estoy totalmente de acuerdo), esta adolescente trendsetter niquela su estilo juvenil con un abrigazo no apto para pro-PETA's.
Cómo llevar unos leggings (segunda parte): así, sin más que con un jersey oversize encima y con un buen tacón para estilizar.
Giovanna Battaglia no podía faltar en el ranking, y menos si lo hace con unos pantalones tobilleros simulando el estampado de pitón de Kate Moss para Topshop que también pueden ser nuestros ( en cuanto lleguen a España).
Por último me quedo con este par de gemelas tan peculiares que parecen salidas de una novela de Virginia Woolf pero con un toque Gossip Girl: una, del clan de las que no sienten el frío, con minivestido negro y bota militar acharolada, y la otra, con chaleco de piel berenjena y bolso acolchado de Chanel.
En Trendencias | The Sartorialist, Garance Doré, Géraldine Dormoy
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