¡Y entonces llegó ella! Katy Perry ha pisado por fin la alfombra roja neoyorquina de la Gala MET 2019 y ha parado hasta el tráfico. Porque su vestido y su look completo parecen sacados de otro universo y son totalmente locos. Ella sabe bien cómo despuntar por encima del resto de asistentes en una fiesta como esta y no ha sido nada tímida a la hora de hacerlo: si el motto era el camp más teatral, ella ha cumplido.
Por supuesto, solo hay un diseñador que haría semejante locura estilística y es Moschino. Porque Katy Perry se supera cada Gala MET, convirtiéndose en un chandelier sacado de la mismísima película de La bella y la bestia. ¡Si lleva hasta luces de verdad que se encienden para que esté siempre en el foco de atención!
Un estilismo que de cómodo debe de tener poco e imaginamos que terminará quitándose toda la estructura de la lámpara que conforma su tocado y el cancán de su vestido. Eso sí, sin ellos se quedará solo en un minivestido de embellishement, pero el espectáculo ya ha sido servido. En bandeja de plata, como se espera de una cena a la luz de semejante lámpara.
Fotos | Gtres.
